Médicos hablan claro contra
órdenes pandémicas del gobierno
SENADO PR: Comisión de Asuntos de Vida y Familia

Por: José Santiago Gabrielini
Periodista
jueves 8 de septiembre de 2022
En la segunda vista sobre el manejo de la pandemia en Puerto Rico, efectuada el miércoles 7 de septiembre de 2022, ante la Comisión de Asuntos de Vida y Familia del Senado de Puerto Rico, presidida por la senadora Joanne Rodríguez Veve, en colaboración con la representante Lisie Burgos, ambas del Partido Proyecto Dignidad (PD), los médicos Dr. Rafael Iván Iriarte (epidemiólogo) y la Dra. María Carrascal (Pediatra, alergista e infectóloga) presentaron, de manera independiente, comprometedoras deposiciones que ponen en jaque la política pública y manejo por parte del Estado en torno la pandemia del Covid-19, incluyendo la vacunación forzada y la utilización de mascarillas.
Como figura central en la vista de seis horas de duración, compareció el secretario del Departamento de Salud, Dr. Carlos Mellado López, flanqueado por las principales oficiales de la agencia, las doctoras Iris Cardona y Melissa Marzán, quienes defendieron a brazo partido las medidas adoptadas en las órdenes ejecutivas y administrativas, así como la necesidad de vacunación con cada vez más dosis, debido a las nuevas variantes y la alegada peligrosidad del virus, entre otros muchos aspectos ya conocidos como parte de la propaganda gubernamental.
Sin embargo, ante las incisivas preguntas de Rodríguez Veve, las cuales produjeron varios careos entre los representantes del ejecutivo, ni Mellado ni sus acompañantes pudieron explicar cuál es la duración “exacta” de la alegada protección de las dosis y se distanciaron de manera un tanto ambivalente de la exigencia de vacunación exigida por hospitales y oficinas médicas, así como con aquellos médicos que no atiendan a algún paciente por no estar vacunados.
Otro aspecto en donde Mellado tuvo que recapitular, fue en cuanto a la segregación de estudiantes no vacunados, la exigencia del uso de mascarillas en las escuelas en áreas exteriores y la expedición del certificado de salud, dejando ver que no existe directriz para negar el certificado a personas no vacunadas, y en un ambiguo juego de palabras, que estos tenían manera de obtener el certificado si presentaban las exenciones de vacunación.
En un momento dado y ante la presión de los reclamos de atropellos a la población, el titular de Salud indicó que “las medidas (adoptadas) son para quitarse, no para aumentar (mandatos)”.
También trascendió en la vista, que la agencia ha recibido cerca de $700 millones para atender la pandemia, de los cuales $170 millones fueron utilizados en vacunación. La Comisión investiga el uso del resto del dinero y los contratos otorgados.
Un aspecto relevante que salió a relucir en la vista, fue la baja tasa de letalidad de este virus en Puerto Rico, que Mellado atribuye a las vacunas y los médicos citados a la propia naturaleza del virus y la inmunidad natural, que luce ser más segura y categórica que la breve inmunidad inducida por “las llamadas vacunas” ARNm.
El epidemiólogo, Dr. Iriarte hizo hincapié en la inefectividad o imprecisión de las pruebas PCR para la clasificación de casos: “Para mi la peor práctica establecida en la respuesta al Covid-19 ha sido la manera que se ha utilizado para clasificar un ‘caso’. Toda la vida un caso ha sido las personas enfermas con unos síntomas establecidos… Cualquier persona que tenga una prueba positiva para el virus Sars-Cov-2 se clasifica como un caso”, indicó el reconocido galeno, quien hizo la diferencia entre un resultado positivo y estar enfermo, así como el hecho de que una persona positiva por meramente tener un resultado positivo sin síntomas “no tiene ninguna capacidad de ser riesgo para la comunidad”.
Para este profesor médico de 30 años de experiencia y experto en Salud Pública, las estadísticas pudieran haber sido sobreestimadas a causa de estas pruebas.
Iriarte destacó que las restricciones impuestas “han sido contrarias a todos los principios de salud pública” y que “se ha convencido a la población que todos los individuos que caminan por la comunidad son potenciales transmisores del Covid, cuando esto en realidad es un concepto incorrecto”.
Además Iriarte recalcó el falso concepto de la alta letalidad del Covid: “Se ha vendido el concepto de que si alguien me pega el Covid me voy a morir”, algo que aclaró solo ocurre en individuos con características particulares que los pone en alto riesgo, como lo son: la edad avanzada, enfermedades crónicas y la obesidad.
En cuanto a las vacunas, Iriarte dejó claro que existe evidencia científica que las vacunas “no producen efectos protectores a largo plazo, no reducen las infecciones, hay mayores aumentos de casos en países donde hay mayores porcentajes de vacunación y pueden producir efectos adversos serios”. Iriarte fue categórico en que estas vacunas no deben ser administradas en niños.
Con relación a los aspectos éticos, Iriarte expresó: “Se ha llegado a establecer la práctica, que yo encuentro de cuestionable carácter ético, de ofrecer incentivos económicos a niños para promover que se vacunen”, puntualizó el epidemiólogo.

La infectóloga, Dra. María Carrascal fue enfática en que las pruebas PCR no son el mecanismo confiable para la clasificación de casos, ni mucho menos útil pues “no cuantifica, no me dice la viremia de ese paciente, por lo tanto no es útil para mi… no me dice nada… yo tengo que ver a mis pacientes, ver los síntomas y ver si esa prueba correlaciona con los síntomas”, indicó Carrascal, quien señaló que en Puerto Rico se corren las pruebas PCR en los laboratorios en unos ciclos que propenden a producir falsos positivos.
Carrascal, quien también es pediatra fue clara e insistente en que tanto las vacunas, como las mascarillas no son recomendables en niños.
En el caso de las vacunas indicó que sus sistemas inmunológicos son muy robustos y que puede entender que se quiera proteger a los abuelos vacunando a los niños: “Esos abuelos que están en riesgo, que no todos están en riesgo, porque no todos tienen enfermedades co-morbidas, y los datos lo han validado, aún pacientes de 65 años en adelante han tenido la enfermedad y han salido bien”, expresó carrascal, haciendo hincapié en que los niños de 10 años para abajo prácticamente no transmiten la enfermedad.
Cabe señalar que ambos expertos, tanto Iriarte, como Carrascal, enfocaron la baja mortalidad, la manejabilidad del virus y la enfermedad, que apunta a la inexistencia del llamado “estado de emergencia” que defienden Mellado y el gobernador, Pedro Pierluisi; la disponibilidad de mecanismos y tratamientos mas allá de las interminables dosis de vacunas y el potencial daño a la salud de la población en general con el uso prolongado e innecesario de mascarillas.
Así quedó en record, dejándole claro al pueblo de Puerto Rico, que existe una comunidad médica de alto calibre, a la cual los principales medios de comunicación orquestadamente mantienen al margen, que está opuesta al discurso oficialista, alertando a la ciudadanía y dispuestos a presentar realidades científicas con datos y experiencia.
El autor es periodista acreditado por el Departamento de Estado de Puerto Rico Miembro de la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (ASPPRO)
Miembro de la Asociación Nacional de Periodistas Hispanos (NAHJ), Washington DC